Titanes y la castración de Urano. Mitos de Lunas (Saturno)
Transcripción del episodio
El 25 de marzo de 1655 el astrónomo holandés Christiaan Huygens, usando un telescopio que el mismo había diseñado, descubrió el que hoy sabemos es el satélite más grande de Saturno, luna que lleva por nombre Titán.
Titán es una de las lunas más interesantes del sistema solar, esto debido a que es uno de los sitios en los que se cree se podría establecer la humanidad en un futuro, pero no solo la luna Titán es interesante, si no también los seres mitológicos a los que debe su nombre, los Titanes, seres ancestrales, que gobernaron el mundo antes de que los Olímpicos los derrocaran en una violenta sublevación, algo que ellos mismos había realizado previamente de manera menos ortodoxa.
Bienvenido a Mitos y Más un espacio en el que cuentos mitos y leyendas de todo el mundo, historias desarrolladas por diversas culturas, en las que monstruos, dioses y humanos, conviven, algunas ampliamente conocidas, aunque tal vez tengan matices que te sorprenderían, otras poco extendidas, pero que tienen mucho que decir.
Antes de abordar las conflictivas relaciones familiares de los titanes, hablemos acerca de Titán, este mundo extraordinario que órbita al gigantesco Saturno, se caracteriza por ser la única de las cerca de 150 lunas conocidas del sistema solar que cuenta con una atmósfera sustancial, la misma se halla compuesta principalmente de nitrógeno, lo que la hace muy similar a la atmósfera terrestre. Además Titán es el único lugar, aparte de la Tierra, del que conocemos hasta ahora, que tenga nubes, lluvia, ríos, lagos y mares líquidos, todos formando un ciclo continuo, similar al que realiza el agua en nuestro planeta, solo que en el caso de esta luna, el compuesto que desarrolla este ciclo es el metano.
Pero en Titán no solo existe metano, también existen grandes cantidades de agua, las que se encuentran escondidas principalmente debajo de su gruesa corteza congelada, y como en alguna ocasión dijimos donde existe agua, de alguna manera podría existir vida, y tal vez esos mares de metano, podrían albergar alguna forma de vida de la que no seamos conscientes, hasta este momento, quien sabe, aun tenemos mucho que descubrir.
Ahora el mito…
Titán, no se refiere a única entidad dentro de la mitología griega, sino a un amplio grupo de deidades ancestrales, los cuales en principio fueron descendentes directos de Urano, la representación primigenia del cielo, y Gaia también llamada Gea, la madre tierra, estos seres como dijimos poblaron el mundo mucho antes de que los olímpicos, las deidades más conocidas de la mitología griega, gobernaran en la tierra al mando de Zeus.
Se conoce un total de doce titanes y titánides primordiales, Cronos, Ceo, Crio Japeto, Hiperion, Oceano, Rea, Tea, Febe, Mnemosine, Temis y Tetis, además algunos de sus hijos también recibieron el apelativo de Titanes, por ejemplo Atlas y Helios.
La manera en que los titanes llegaron al poder es bastante bizarra, si se puede decir de alguna manera, ya que literalmente debieron castrar a su padre, Urano, todo esto incitado por parte de Gaia, madre de los titanes y esposa de Urano.
Para entender como llegamos al punto de que los propios hijos de Urano, deban castrarlo, tenemos que retroceder un poco, casi a los orígenes del universo mismo, según los griegos, existían una serie de deidades primordiales, Urano el cielo y Gaia la Tierra, son dos de los más importantes, ya que de su unión nacerían de una u otra manera la mayor parte de las grandes deidades del panteón griego.
Resulta que los primeros hijos que tuvieron en conjunto, fueron seres monstruosos, de gran poder, unos que tenían un solo ojo llamados Cíclopes, y otras criaturas con cien manos los Hecatónquiros, al parecer estos hijos no gustaron mucho a su padre Urano, que los encerró dentro del cuerpo de Gaia, obviamente esto no gusto para nada a la madre tierra, la que según indican los mitos sintió un gran dolor, en primer lugar eran sus propios hijos los que no podían estar libres en el mundo, en segundo lugar, imagínate tener dentro de ti a seis seres gigantescos, con un poder descomunal, moviéndose por tus entrañas.
Ahora bien volvamos a nuestra historia, Gaia esta muy molesta con Urano, y habla con sus hijos para que la ayuden, en realidad ya había desarrollado un plan, castrar a su esposo. Así que convence a sus hijos para que la ayuden. En un principio los titanes se muestran recelosos, y casi todos ellos echan para atrás al escuchar el plan de su madre, pero al final uno de ellos, Cronos, termina aceptando hacerse cargo de castrar a su padre, con una hoz que la misma Gaia había creado.
Así que un día, mientras el cielo desciende para fecundar a la tierra, cuatro de los titanes Hiperión, Crio, Ceo y Japeto sujetan a su padre desde cada uno de los puntos cardinales, mientras que Cronos, hoz en mano cercena el miembro viril de su padre, quitándole según dice el mito, buena parte de su poder. Unas gotas de esperma del dios ahora castrado caen en el mar, y dan origen a la Afrodita Urania, una de las dos formas en las que la diosa del amor era representada en al antigua Grecia, pero eso es tema de otro episodio.
Tras la castración de Urano, Cronos libera a Hecatonquiros y Ciclopes aunque por un corto periodo de tiempo, ya que el titán los considera una amenaza para su reinado y los condena al Tártaro, una especie de inframundo para los antiguos griegos. Cronos además recibe las profecías de su padre y madre que indican que será depuesto por uno de sus hijos. Algo que obliga a que el titan devore a sus hijos, tema que ya tratamos en el episodio anterior.
Plan que no funcionó del todo bien, ya que Zeus logro escapar, y posteriormente rescatar a sus hermanos, esto porque que no habían muerto al ser devorados, obviamente eran inmortales.
Cuando Zeus recupero a sus hermanos, libero a Ciclopes y Hecantoquiros de su encierro en el Tártaro, estos como agradecimiento se unieron a sus fuerzas en la lucha contra Cronos, además los Ciclopes que eran hábiles herreros, forjaron las armas de Zeus (el rayo), Poseidón (el tridente) y Hades (el casco de invisibilidad), y fue según los escritores antiguos, esta presencia la que determino el resultado final de la guerra. Una guerra tan intensa, que incluso movió al cielo de su sitio, lo que obligo a que posteriormente Atlas lo tuviera que sostener en su lugar.
Si bien no todos los titanes intervinieron en la guerra, aquellos que lo hicieron y no murieron durante la batalla fueron encerrados en el Tártaro, los que no habían participado en la guerra continuaron viviendo en la tierra, aunque a sin el poder y el renombre de antes.
Al final no importa cómo se cuenta la historia, siempre termina mal para los que la pierden, los titanes en este caso, o el mismo Cronos en persona.
Aunque no es que a nosotros meros mortales, nos haya ido mejor con los olímpicos, es lo malo de los dioses, ellos tienden a ser así, a jugar con nosotros, con todo, con la lunas también.
Mientras tanto no podemos más que continuar buscando historias en las estrellas, permanezcan atentos, porque aun hay muchos más dioses y leyendas en camino.
Y en cuanto a la luna llamada Titán, no olvidemos que tal vez en un futuro podría ser nuestro proximo hogar. Hasta entonces, tratemos de mantener los pies en la tierra.
Fuentes consultadas:
- Nasa Science Solar System Exploración. Saturn Moons: Titan In depth. Disponible en : https://solarsystem.nasa.gov/moons/saturn-moons/titan/in-depth/
- Lunine, J. I., & Atreya, S. K. (2008). The methane cycle on Titan. nature geoscience, 1(3), 159. Disponible online en https://www.nature.com/articles/ngeo125
- Hesiodo. La Teogonía. Createspace independente Pub. https://amzn.to/2mxMhWf
- Titans. En theoi.com